Pablo González.
En la entrada peatonal de UES, conocida como la Minerva, la Asamblea general Universitaria (AGU) ha instalado una manta, alusiva a los problemas generados por el actual gobierno, en concreto, el primero, las variadas intrusiones contra la autonomía universitaria y la anunciada por las piedras del rio, que bastante suenan. El segundo problema es la asfixia de la universidad, vía el cese de las transferencias presupuestarias, desde al año 2022, que a la fecha suman 52 millones de dólares.
El señor Rector se ha pronunciado al respecto, en variadas ocasiones, incluso en la recién asamblea de la Sociedad de Ingenieros Agrónomos de El Salvador (SIADES), en las entrevistas por radio, televisión y en reuniones con representantes del actual órgano ejecutivo.
Próximamente, la Comisión Especial de la AGU denominada “La universidad se niega morir” ejecutará el montaje de otras mantas, en entradas vehiculares de la universidad, para denunciar estos dos problemas, que el actual gobierno está causando. El propósito es hacer saber a los estudiantes, personal administrativo, docentes y al pueblo en general, de la problemática que la universidad está pasando, con el objeto de aunar esfuerzos y desenmascarar la propaganda de mentiras a la cual estamos sometidos.
La Comisión Especial se instauró el pasado 15 de febrero, con miembros de la Asamblea general Universitaria, con el propósito de generar acciones de lucha, por la restauración plena de la autonomía y hacer que el órgano ejecutivo cumpla la Ley del Presupuesto General de la nación. Para ello, el día 5 de marzo, la AGU aprobó el plan de acción de la referida Comisión, el cual entre sus puntos claves contiene los siguientes:
- Coordinar actividades con la secretaría de Comunicaciones de la UES.
- Enviar nota al CSU, para que se abstengan de continuar prestando áreas del campus universitario para actividades ajenas e injerencistas. Resulta que las mismas personas que, como Rector y Vicerrector Administrativo, originaron el entuerto, ahora les tocara resolverlo.
- Girar cartas a las asociaciones de profesionales, decanatos de las facultades, entidades internacionales y cuerpo diplomático, para solicitar apoyo.
- Organizar eventos con los diferentes actores inmiscuidos, para discutir la problemática y plantear soluciones.
Involucrar a la secretaría de Relaciones Internacionales de la Facultad de Ciencias Jurídicas, para aunar esfuerzos.
Los primeros pasos son, vencer el miedo y tomar consciencia de la gravedad del caso, que afecta directamente al sector social, que utiliza la UES para superarse educativamente, a fin de ser útil a sociedad, a través del conocimiento. Agradecemos a nuestras fuentes de información en la AGU, por los datos aportados, así como a otro sector, que informa estar organizando un colectivo, capaz de aplicar el estado de excepción a los funcionarios del órgano ejecutivo, que están en sus mapas como actores de la problemática.