907,000 personas en El Salvador están en fase crítica y de emergencia respecto a inseguridad alimentaria, mientras que cerca de un 50% de las y los salvadoreños no tiene los alimentos suficientes para nutrirse de buena forma. Esta situación se vive en un contexto donde la gestión del presidente Nayib Bukele, quien pretende ir a reelección, ha sido progresivamente cuestionada en relación a la ausencia de derechos sociales.
El Salvador vive hambre. Y es que durante los últimos años la inseguridad alimentaria de carácter moderada y crítica ha crecido entre la población salvadoreña, pasando de un 42,2% entre 2014 y 2016, a un 46,5% entre 2019 y 2021. De esta, un 14% se encuentra en fase crítica.
Así, el régimen de Nayib Bukele que ha intentado instaurarse como un referente en temas de seguridad desplegando una criticada política de encarcelamiento contra la población, hoy devela una profunda ausencia de derechos sociales por parte de la administración de quien quiere ir por la reelección.
Así lo dan cuenta no solo contundentes informes de organismos, sino también reportajes de investigación que muestran el día a día que vive parte de la población salvadoreña.
Mediante diversas historias, el medio El Faro ha reunido experiencias de habitantes de El Salvador que afrontan el hecho de que «10,456 personas cayeron en pobreza extrema en los últimos tres años, lo que quiere decir que no cubren el costo de una canasta básica y no logran comer tres veces al día. 907,000 personas están en fase crítica y de emergencia en términos de inseguridad alimentaria, a unos pasos para caer en hambruna».
En este sentido, El Faro explica que elementos como el «aumento del precio de la comida, la pérdida de cosechas por la crisis climática y la falta de apoyo agrícola han elevado el número de personas que viven omitiendo tiempos de comida».
Así, la crítica ha ido apuntando a las insuficientes políticas públicas impulsadas por Bukele respecto a esta materia. Mientras que, en contraparte, se aumenta la inversión a para partidas de comunicaciones y prensa de Presidencia.
Fotografía principal: Montaje a partir de registros de Víctor Peña y Carlos Barrera
