Comunicado al pueblo de El Salvador y a los pueblos del mundo
Desde su instauración, el gobierno de la administración Bukele viene demostrando una abierta postura de sometimiento a los intereses de Estados Unidos en nuestra política, tanto nacional como internacional.
El inaceptable injerencismo de una potencia extranjera en los asuntos internos de nuestro país son cada vez más evidentes y se reflejan en los cuestionables mensajes y discursos generados desde la Presidencia de la República y desde la Cancillería.
El ejemplo más reciente de esta afirmación son las posturas adoptadas por la Canciller Hill Tinoco en la Asamblea General de la OEA, donde nuestra país rompió con la tradicional política de no injerencia en asuntos internos de países hermanos, mantenida celosamente durante las administraciones del FMLN.
En este sentido, condenamos el triste papel jugado por nuestra Canciller al declarar unilateralmente desconocer el gobierno legítimo de la República Bolivariana de Venezuela, y a su mandatario constitucional, el Presidente Nicolás Maduro Moro.
Del mismo modo, rompe con nuestra tradición de respeto a la soberanía de los países hermanos, cuestionando los asuntos internos de la hermana República de Nicaragua.
No expresa la Canciller, sin embargo, preocupación alguna por el maltrato institucionalizado que sufren nuestros migrantes cuando caen en manos de las autoridades de EEUU; tampoco reclama por las vidas perdidas de quienes huyen del país en busca de un mejor futuro en tierras lejanas.
Expresamos con toda energía nuestra condena a esta política exterior, huérfana de soberanía y dependiente de intereses foráneos. Externamos al mismo tiempo nuestra renovada solidaridad y respeto a los pueblos y gobiernos de nuestras hermanas repúblicas de Nicaragua y Venezuela, cuya voluntad popular ha sido mancillada de manera irresponsable e irrespetuosa por la Canciller del gobierno de Bukele.
Comisión Política
San Salvador, 28 de junio de 2019