Palestina no deja sufrir el horror, este jueves 15 de febrero el ejército
israelí bombardeó con drones dos casas en la Ciudad de Rafah, asesinando a
10 palestinos, una acción abominable en contra de la población civil. De
acuerdo al Ministerio de Salud palestino, desde el inicio de las operaciones de
las fuerzas de ocupación en Gaza, las victimas ascienden a 28.663, además de
68.395 heridos y una cantidad de desaparecidos de los cuales no hay datos
certeros.
En Rafah se vive bajo el terror, sabiendo que si el ejército israelí
invadiera la ciudad, no quedará ningún sitio donde huir, ni donde protegerse.
Se calcula que son aproximadamente 1,5 millones de palestinos que se
encuentran en esta ciudad limítrofe con Egipto, hacinados en 63 km cuadrados.
Escasean los bienes de primera necesidad, las medicinas, los médicos se ven
obligados a realizar amputaciones sin anestesia, una verdadera catástrofe, que
de haber sido llevada a cabo por un gobierno del sur global, ya estaría siendo
condenada y deplorada.
Débil presión internacional
No cabe duda que se ha hecho evidente la debilidad de la comunidad
internacional ante las atrocidades del Estado de Israel en Palestina. Una mayor
presión se ha percibido desde los movimientos y organizaciones sociales a
nivel mundial que no han cesado las protestas. Incluyendo al mundo artístico
que desde un palco internacional como el Festival de la Canción Italiana en
San Remo, muchos cantantes declararon su oposición a la guerra en Palestina,
y pidieron parar el genocidio.
Desde Estados Unidos llegan rumores de crecientes tensiones entre Joe
Biden y Benjamin Netanyahu, pero hasta ahora el primer mandatario
norteamericano se ha limitado a críticas sin una decisión contundente que lleve
a un alto al fuego en Palestina. Es posible que esta indecisión se deba a la
campaña presidencial que ya comenzó y que señala una posible segunda
candidatura de Biden a la Casa Blanca, pese a su estado senil. Sin embargo,
hay que señalar que desde el final de la Guerra Fría no es la política exterior la
que tiene el mayor peso en la elección de un presidente norteamericano. Hoy
es la economía, la presión de la inmigración, el aborto, las relaciones raciales,
la proliferación de armas y tantos otros temas que preocupan a los
estadounidenses.
Así mismo la percepción sobre el Estado de Israel ha cambiado
drásticamente, porque los hechos lo señalan no como víctima sino como autor
de una masacre despiadada. En un mundo interconectado es difícil esconder
las imagines de los bombardeos, la matanza de civiles, de niños, niñas, de
personas indefensas. No se puede sostener la devastación del pueblo palestino
con la narrativa de una venganza justa, por los hechos del 7 de octubre de
2023.
Estrategia de Netanyahu
El apoyo popular a Netanyah, es actualmente el más bajo de los 15
años que lleva gobernando. Pero las encuestas también dicen que sólo una
minoría de israelíes apoya la creación de un Estado palestino y una gran
mayoría de la opinión pública quiere continuar la guerra. Benny Ganz y Gadi
Eisenkot, los dos ex generales que son posibles alternativas a Netanyahu,
discuten a diario con él pero siguen en el gabinete de guerra, saben que los
votantes no entenderían su dimisión mientras siga habiendo combates.
Una invasión terrestre de Rafah por las fuerzas de ocupación israelíes,
de acuerdo a expertos militares es poco probable por la estructuración y
despliegue actual de las tropas sionistas. No obstante Netanyahu continúa
amenazando con una operación en Rafah. Esto último obedece a una
estrategia política del premier con la cual está intentando desesperadamente
convencer a los israelíes de que sólo él está lo suficientemente decidido a
“llegar hasta el final”; mientras que sus rivales en el gabinete de guerra, Gantz
y Eisenkot, y el Estado Mayor de las Fuerzas de defensa israelíes, se muestran
mayormente centrados en llegar a un acuerdo sobre los rehenes en manos de
Hamas.
El odio de Netanyahu hacia Palestina se traduce en su obsesión por
destruir totalmente la Franja de Gaza, ahora justificada inutilmente como
defensa contra Hamas. Este primer Ministro, que pasará a la historia de la
humanidad como un vil carnicero, también ha intentado cambiar la sociedad
israelí, desplazando su equilibrio cada vez más hacia la derecha. El resultado
ha sido una fuerte inestabilidad (cinco elecciones políticas en tres años y
medio), la radicalización del debate político, la división interna, que culminó en
las grandes protestas callejeras contra la “reforma” del poder judicial,
finalmente rechazada por el Tribunal Supremo. No es descartable que la
operación del 7 octubre haya sido ideada para expulsar del debate público
israelí el tema del logro de la paz y la convivencia con los palestinos.
El mundo no puede seguir ignorando el asesinato en masa de miles de
personas inocentes, por los caprichos de una elite sionista gobernadas por un
asesino, cuyo único objetivo es usurpar por la fuerza una tierra que
históricamente pertenece a los Palestinos, que es suya, y que es fundamental
para su identidad nacional y para el futuro de las nuevas generaciones de
palestinos y palestinas.
Yoselina Guevara López: comunicadora social venezolana, analista política,
articulista en diferentes medios internacionales, cuyo trabajo ha sido traducido
al inglés, italiano, griego y sueco. Ganadora del Premio Nacional de Periodismo
Simón Bolívar 2022 (Venezuela), mención especial Opinión; Premio Nacional
de Periodismo Aníbal Nazoa 2021 (Venezuela); I Concurso Memoria Histórica
Comandante Feliciano 2022 (El Salvador) Tercer lugar. Red Social X:
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