Matagalpa, la Perla del Septentrión es un lugar singular, en el cual viven indígenas matagalpas y chorotegas. Sus montañas, quebradas y parcialidades, habitadas por mujeres y hombres, que han escrito hermosos pasajes patrióticos en la historia de Nicaragua. En las horas decisivas para defender la patria de las hordas filibusteras, los indios flecheros de Matagalpa, marcharon a los campos de batalla y participaron heroicamente en la batalla de San Jacinto el 14 de septiembre de 1856. Muchos años después, este legado heroico fue retomado por sus insignes hijos, entre ellos Carlos Alberto Fonseca Amador y Tomás Borge Martínez, amigos desde la niñez y compañeros en la lucha por la liberación de Nicaragua.
El niño que nació en El Laborío
El hijo de Justina Fonseca Úbeda y Fausto Amador, Carlos Alberto Fonseca Amador, nació un 23 de junio de 1936 en el popular barrio El Laborío. Este niño de ojos azules intensos, que agarró en serio la vida, nació con el don de la rebeldía hacia todo tipo de injusticia.
Estudiante destacado
Estudiante destacado, el mejor de su promoción en el Instituto Nacional del Norte, donde en 1954 fundó una célula de estudiantes para profundizar en el marxismo y aplicarlo al análisis de la realidad nicaragüense. Años estudiantiles en los que dirigió la revista “Segovia”.
Los años universitarios en León
A inicios de 1955 culminó sus estudios de bachillerato y se trasladó a la ciudad de León, para estudiar derecho en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-León), incorporándose al Partido Socialista Nicaragüense. Al año siguiente, fue ajusticiado el tirano Anastasio Somoza García, por el poeta Rigoberto López Pérez, y la represión alcanzó a Carlos Fonseca, que fue encarcelado en las redadas de la Guardia Nacional.
Un nicaragüense en Moscú
Un hecho decisivo en su formación política fue su participación en el VI Festival de la Juventud y los Estudiantes, en el año de 1957 en Moscú, capital de la entonces Unión de Repúblicas Soviéticas (URSS) en honor al XL Aniversario de la Revolución de Octubre. Por las calles moscovitas, adornadas con banderas rojas caminaron Carlos Fonseca, Roque Dalton, Raúl Castro, Ricardo Ramírez, Nikolai Leonov, el primer amigo soviético del comandante Raúl Castro y Rolando Morán, de la revolución guatemalteca. Y junto con ellos, muchos otros jóvenes, motivados por sueños de libertad para sus países. Carlos Fonseca, dejó testimonio de este viaje en su celebre libro “Un nicaragüense en Moscú”.
Combatiente de la columna Rigoberto López Pérez
En 1959, asumió la lucha armada y se alzó en armas en la columna “Rigoberto López Pérez”, en la que también estuvo el joven Aldo Díaz-Lacayo. Esta gesta conocida como “El Chaparral”, finalizó con una masacre perpetrada por tropas combinadas del ejército hondureño y la Guardia Nacional. Carlos Fonseca, resultó herido gravemente por una bala que atravesó su pulmón.
Bajo la Bandera de Sandino
Después de Pancasán, vino lo que el historiador Aldo Díaz-Lacayo llamó el “Reencuentro con Sandino”. Carlos había estudiado la historia de los movimientos revolucionarios de todos los continentes, sus triunfos y fracasos. Al mismo tiempo había escarbado en la historia oculta y negada por la dictadura somocista, la historia del Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua (EDSSN) y de su jefe, el general de hombres y mujeres libres, Augusto Nicolás Calderón Sandino. Resultado de esta búsqueda del ideario de Sandino, son sus obras: “Bajo la Bandera del Sandinismo”, y, “Viva Sandino”. Obras fundamentales para estudiar el pensamiento político del sandinismo.
Fuente: https://diariobarricada.com/
Comandante Carlos Fonseca Amador tus hermanas y hermanos de lucha del FMLN te saludan y recuerdan por tu ejemplo y tu entrega. Hasta la Victoria Siempre!