Recientemente a petición del gobierno de Bukele, sus seguidores en la Asamblea Legislativa aprobaron el llamado de #RegimenDeExcecpcion” valga destacar y subrayar la opocisión del Grupo Parlamentario del FMLN.
Al estilo de la dictadura que fue derrotada después de 60 años mediante la firma los acuerdos de Paz, impone el régimen de excepción lo cual le da un cheque en blanco para cometer desmanes en contra de la población salvadoreña. Justificándose en los crimenes cometidos por la delincuencia de las pandillas.
El flegelo de la delincuencia se combate desde el estado y sus instituciones con medidas concretas dirigidas hacia los que las planifican, financian y cometen y no contra la ciudadanía que se gana el pan de cada día honradamente. Tampoco amedrentando madres y niños escolares. La Policía Nacional Civil debe ser el instrumento defensor y garante de los intereses de todos y cada uno de los y las salvadoreñas y no al contrario. Para derrotar la delincuencia hay que hacerlo con planes y medidas destinadas a erradicar la exclusión social, política, económica y cultural que el mismo sistema establecido promueve y reproduce.
La censura a los medios de comunicación es mordaza para que el pueblo salvadoreño no tenga acceso a la información de lo que realmente está pasando ya que los medios oficiales y afines al gobierno de Bukele se dedican a una campaña proselitista anticipada desde la ventaja que le da el estar en pocisiones gubernamentales y estatales. Pero esas medidas No solucionan el accionar de las maras y menos garantiza el derramamiento de sangre a manos de delicuentes comunes miembros de las pandillas que actuan con impunidad muy a pesar del Plan de Control Territorial bukeliano.
La Libertad de Prensa y de Expresión forman parte de los derechos intínsicos e innalienables en toda nación que se precie de ser democrática.
Es triste y lamentable que soldados y policías se presten bajo órdenes o no, intimidar, capturar a quienes con dificultades trabajan, pagan impuestos para pagar el sueldo de cada funcionario de gabinete, de los y las diputadas, de oficiales y bases de las Fuerzas Armadas y de la PNC. Sí realmente quieren acabar con la delincuencia de las maras hagan su trabajo policial investigativo y operativo sin afectar inocentes ni prestándose a la manipulación gubernamental.
La violación a los derechos humanos no debe callarse y mucho menos poner en juego nuestra #LibertadDeExpresion la #LeyMordaza buscá censurar toda vos qué diga la verdad. #NoALaCensura
