Por Yoselina Guevara L.
El 27 de julio de 2023, el presidente de Níger, Mohamed Bazoum, fue
destituido por la guardia presidencial que perpetró un golpe de Estado, dirigido
por el general Omar Tchiani que conformó una Junta Militar. En un comunicado
el cuerpo castrense adujo como razones de la acción el empeoramiento de la
situación de seguridad y la mala gestión de la economía. De hecho, la
inseguridad vinculada a las acciones de los grupos yihadistas activos en la
región va en aumento. Según un informe de la ONU, en el año 2022 hubo más
de 3 millones de desplazados internos en Malí, Níger y Burkina Faso.
Implicaciones regionales, inestabilidad del Sahel.
Las alarmas regionales están activadas debido al temor a un posible
efecto dominó en la región del Sahel, frágil y crucial en el marco del estratégico
“Sur Global” que aumentaría de manera exponencial el número de migrantes
hacia el Sur de Europa. Además de ser una de las zonas más inestables del
planeta, donde la pobreza, el terrorismo islamista y las organizaciones
criminales se imponen definitivamente.
De hecho, el Sahel abarca once Estados y se extiende entre el desierto
del Sáhara, la sabana sudanesa, el océano Atlántico y el mar Rojo. Debido a
los vacíos de poder que se han creado, el Sahel es hoy una tierra de nadie en
materia de seguridad, que está colmada por grupos internos que se oponen a
la presencia francesa y occidental, cuya acción neocolonial desde París y
explotación de recursos en la región no ha cesado, a pesar de las
declaraciones de independencia.
Es necesario destacar que la región del Sahel se ha convertido en el
paraíso de la violencia armada, grupos paramilitares y del Estado Islámico en
sus diferentes acepciones mantienen en vilo a la población. En los Estados de
Mali, Burkina Faso y el propio Níger, entre 2012 y 2019, se registraron 1.463
enfrentamientos armados, y cerca de 4.723 asesinatos de civiles a manos de
195 grupos armados.
Níger: punto neurálgico del África
En cuanto a la situación específica en Níger el presidente depuesto
Mohamed Bazoum había mantenido una política exterior considerada muy
cercana, e inclusive en algunos casos genuflexa, a los intereses de Occidente.
Prueba de ello es, entre otras cosas, la luz verde a la presencia de varios
contingentes extranjeros en territorio nigerino. Además de militares franceses,
también están estacionados soldados estadounidenses, alemanes, italianos y
canadienses. La razón aparente de la presencia internacional es la lucha
contra grupos yihadistas, contrabandistas internacionales y grupos criminales
que explotan el tráfico de seres humanos. Pero también se debe tomar en
cuenta que Níger es un territorio rico en materias primas, como el Uranio, con
cuya importación Francia nutre sus centrales nucleares produciendo el 40 % de
la electricidad que se consume en el país galo. Paradoxalmente en Níger el
89% de la población no tiene electricidad, y es uno de los países más pobres y
con menores índices de desarrollo del mundo.
Junta Militar: entre medidas y sanciones
La Junta Militar encabezada por Omar Tchiani que ahora gobierna Níger
suspendió la Constitución, cerró parte de sus fronteras, tiene el control de los
medios de comunicación, y estableció el toque de queda en el país. Pero
además suspendió la importación de Uranio y Oro a Francia y Estados Unidos.
Esta ha sido la reacción de los militares nigerinos a las sanciones que
les han impuesto la Unión Europea y Estados Unidos que por ahora son la
suspensión de financiamiento y cooperación internacional, así como el no
reconocimiento de la Junta Militar. También los países miembros de la
CEDEAO (Comunidad Económica de Estados de África Occidental) emitieron
un ultimátum a la junta, dándole siete días para devolver el poder al derrocado
presidente Mohamed Bazoum. Amenazando inclusive que con el apoyo de
Francia y Estados Unidos, tomarán todas las medidas necesarias para
restablecer el orden constitucional en el país africano. Lo cual ha sido
interpretado por la Junta Militar como una invasión.
Níger: campo de batalla geopolítico
Por otra parte es interesante que la reacción de la población ha sido de
apoyo a la Junta Militar y en contra sobre todo de la injerencia francesa. Este
30 y 31 de julio hubo numerosas protestas frente a la Embajada de Francia en
Niamey, donde los participantes espontáneamente corearon eslóganes contra
París y en apoyo de los militares, en algunos casos inclusive se vieron
ondeando banderas rusas. Precisamente ante la creciente influencia de Moscú
en el Sahel, el golpe de Estado en Níger podría convertir la región en el
escenario de un nuevo enfrentamiento entre los intereses occidentales y rusos.
En los últimos años, en todo el Sahel, gracias al fracaso de las misiones
francesas en Malí y al avance del terrorismo, las reacciones antioccidentales se
ha hecho cada vez más populares entre la población. La opinión pública de
Níger, así como la de los países vecinos, apunta a ver cada vez más a Rusia
como la principal alternativa para desmarcarse de la influencia y el
colonialismo occidental.
Moscú, por su parte, se ha declarado partidario del Estado de derecho.
Lo que ocurre en Níger, dijo el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, es
“motivo de grave preocupación” y los comentarios del Kremlin sobre el país “no
deben ponerse al mismo nivel semántico” que los realizados por el líder del
Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin. Este último había aplaudido en los últimos
días el golpe asegurando que su gente “puede restablecer el orden”.
Evidentemente el Kremlin se desmarcó de las declaraciones de Prigozhin
asegurando que la Federación rusa está a favor del “rápido restablecimiento
del Estado de derecho en el país” y de la “moderación de todos”.
La incerteza del futuro nigerino
Evidentemente es muy difícil realizar predicciones, porque son
acontecimientos que se están suscitando de manera vertiginosa. No obstante
como hemos podido reseñar en Níger hay muchos elementos, e intereses en
juego sobre todo para Occidente. Para Francia, la pérdida de Níger significa un
duro golpe, por ser uno de sus últimos bastiones en el Sahel y sede de la
importante base militar de Niamey; pero a la vez es la sustancial merma de los
intereses estratégicos europeos en la región. Esperemos que triunfe en Níger
el bienestar de las mayorías, en un país que ha sido víctima de siglos de
explotación, pobreza y sufrimiento.
Yoselina Guevara López: comunicadora social venezolana, analista política,
articulista en diferentes medios internacionales, cuyo trabajo ha sido traducido
al inglés, italiano, griego y sueco. Ganadora del Premio Nacional de Periodismo
Simón Bolívar 2022 (Venezuela), mención especial Opinión; Premio Nacional
de Periodismo Aníbal Nazoa 2021 (Venezuela); I Concurso Memoria Histórica
Comandante Feliciano 2022 (El Salvador) Tercer lugar. Twitter:
@lopez_yoselina #MundoTuit