En El Salvador la educación ha decaído notablemente

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El bienestar de una nación se mide en el beneficio que la población goza en salud, educación, derechos laborales y en el reparto equitativo de las riquezas producidas por la fuerza laboral.

Durante los pasados cuatro años de gobierno en El Salvador con Bukele como jefe de Estado ha caído considerablemente en detrimento de las grandes mayorías. La concentración del poder del poder político, el enriquecimiento de parte de funcionarios del actual gobierno es a todas luces un hecho. La administración Buikele se ha negado a presentar informes sobre el manejo de los fondos de las finanzas públicas. Su gobierno colma los niveles de nepotismo y favoritismo a familiares que también son empresarios y a amistades con beneficio.

En esta ocasión abordamos el tema importante de la educación a la cual tanto la niñez como la juventud salvadoreña tienen derecho según la Constitución Política. Según reportes de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe CEPAL la nación centroamericana cayó entre los 3 países con mayor crisis educativa en todo el hemisferio.

A su llegada al ejecutivo el actual inquilino de Casa Presidencial CAPRES, echó por tierra muchos programas estatales con función social y de cara a la satisfacción de las necesidades básicas de la población salvadoreña. El sistema educativo no fue la excepción y la cantidad de deserciones de niños y jóvenes en edad escolar ha aumentado así como a bajado la calidad del sistema educativo en la cual tanto estudiantes como maestros son los afectados.

Escuelas en mal estado físico que significa un deterioro de igual manera en el ambiente físico laboral del magisterio y de aprendizaje para niños y jóvenes. Una de las promesas del actual gobernante fue de remodelar más de 5 mil centros escolares y construir nuevas. Hasta la fecha brillan por su ausencia, sin embargo abundan en las redes sociales que El Salvador es el país donde todos viven y cantan felices.

La educación es un privilegio para algunos y un imposible para muchos.

El Salvador necesita menos propaganda y más hechos, menos despilfarro de los inpuestos de las y los salvadoreños y educación.

Por el derecho a la educación para todos en El Salvador, el FMLN en pie de lucha.

Así marcha y camina la mentira entre nosotros.
Así las actitudes de los irresponsables.
Y así el mundo ficticio donde cantan
como canarios tísicos,
tres o cuatro poetas,
empleados del gobierno

“Patria Exacta” Oswaldo Escobar Velado 1919-1961