@lopez_yoselina
La autora es periodista y analista política. Ganadora del Premio Nacional de
Periodismo Simón Bolívar 2022
Por Yoselina Guevara López
Algunos miembros de los servicios de inteligencia internacionales deben
estar aún sin poder dormir por la filtración en las redes sociales de más de 100
documentos confidenciales que han proporcionado nueva información sobre
cómo Estados Unidos espía tanto a sus países amigos (Ucrania e Israel, por
ejemplo) como enemigos (Rusia y China). A la vez los archivos develados
señalan los “Planes de Guerra” de Washington y la OTAN para ayudar a
Ucrania en sus esfuerzos bélicos contra Rusia.
Los documentos altamente clasificados proceden de diversas agencias,
como el Departamento de Estado norteamericano, la NSA (Agencia de
seguridad), la CIA (Agencia Central de Inteligencia) y la Inteligencia
Geoespacial. Aunque desde las esferas militares norteamericanas se ha
intentado infructuosamente de minimizar el hecho, las alarmas están
encendidas a nivel mundial por el temor a que las revelaciones puedan poner
en peligro fuentes sensibles y comprometer importantes relaciones exteriores.
Papeles secretos de la guerra
En cuanto al conflicto Rusia- Ucrania son cantidades de documentos
filtrados que incluyen mapas, estadísticas, conversaciones, etc. De acuerdo a
declaraciones del portavoz del Kremlin Dmitri Peskov, los archivos demuestran
el alcance de la implicación de Estados Unidos y la OTAN en Ucrania.
En los archivos Top-Secret develados se muestran interceptaciones de
conversaciones de altos cuadros militares rusos, así como de mandatarios
claves en el conflicto ruso-ucraniano como el presidente Zelensky y el primer
ministro israelí Netanyahu. Los documentos revelan la penetración de la
inteligencia estadounidense en el Ministerio de Defensa de la Federación rusa.
La filtración pone de manifiesto la preocupación de Washington por el Grupo
Wagner, el seguimiento detallado que hace de sus movimientos, reclutamiento,
y lógicamente el temor que la fuerza de este grupo de apoyo militar ruso
representa en el campo de batalla.
Además los papeles revelan debilidades en el armamento ucraniano, la
defensa antiaérea y el tamaño de los batallones de Kiev. Hay datos sobre la
poca preparación de las fuerzas ucranianas para lanzar una contraofensiva
contra los rusos; en este aspecto es interesante como este cúmulo de
información que maneja los Estados Unidos no haya sido compartida con sus
aliados ucranianos. Esto no sorprende porque evidentemente Kiev es un
instrumento, una marioneta en las manos de Washington y la OTAN.
Probablemente desde Moscú ya manejaban gran cantidad del contenido
de los documentos secretos, si les faltaba saber algo ahora tienen información
detallada del entrenamiento y todo el equipamiento bélico que el bloque de
aliados occidentales proporciona a Ucrania. Esto abarca desde la enumeración
de los tipos tanques, vehículos blindados, piezas de artillería e inclusive hasta
mapas con líneas de tiempo de los caminos congelados y el lodo, y la
evaluación de las condiciones del suelo y sus posibles cambios en el Este de
Ucrania a medida que avanza la primavera. Uno de los documentos, con fecha
del 23 de febrero de 2023 describe en detalle cómo los sistemas ucranianos
de defensa aérea S-300 de la era soviética se agotarían en el mes de mayo si
se continúa con el porcentaje de uso actual. Así mismo en uno de los archivos
se hace referencia a que las bombas ucranianas con el sistema JDAM
(Munición de Ataque Directo Conjunto) no han funcionado últimamente debido
a que las espoletas de las mismas no han estado debidamente armadas.
Vigilancia de amigos y enemigos
Además de la descripción del estado de las fuerzas armadas ucranianas,
los archivos señalan información susceptible sobre algunos importantes
aliados de Washington. Desde Israel hasta Corea del Sur, los documentos
revelan debates internos que esos países están teniendo sobre Ucrania y otros
temas delicados. Se incluyen detallados dossiers de seguridad sobre China;
Indo-Pacífico; Medio Oriente (en particular Israel y los jefes del Mossad, la
agencia de inteligencia israelí); y el terrorismo.
Por ejemplo uno de los documentos Top Secret producto de una
actualización de la CIA con fecha del 1 de marzo de 2023, señala que la
agencia israelí de inteligencia Mossad estaba alentando las protestas contra los
planes del primer ministro, Benjamin Netanyahu, tras su intento controlar la
Corte Suprema de Justicia a través de una reforma judicial. El domingo 9 de
abril de 2023, el departamento de prensa de Netanyahu señaló que “el Mossad
y su personal en servicio no se han involucrado en absoluto en el tema de las
manifestaciones y están dedicados a la responsabilidad y el valor del servicio al
Estado que ha guiado al Mossad desde su fundación”. Un incidente que se
suma al distanciamiento evidente entre Washington y Tel Aviv; si el objetivo de
la publicación de estos documentos era dividir para vencer, evidentemente se
está cumpliendo a cabalidad erosionando los cimientos imperiales.
Este escándalo de papeles que van y vienen demuestra que ni siquiera
los más desarrollados servicios de inteligencia están blindados. Por ahora esto
parece ser solo el comienzo, la guerra sigue su onda expansiva a otros
escenarios que siempre han existido pero que se magnifican por el desarrollo
tecnológico que la humanidad ha alcanzado.