Los techos y los sin techos, los que viven casas residenciales o los que viven en casas de lata y cartón, entre ellos quiénes son a tomar en cuenta entre justamente al sector que Monseñor Romero se convirtiera en la voz de los sin voz?
La pregunta es ingenua que raya en lo que es a todas luces visible, sin embargo para el ilustrado gobierno central y a en algunas esferas es conocido por “Batman” la apremiante realidad por la que atraviesan millares de ciudadanas y ciudadanos salvadoreños no es tan conocida o simplemente es ignorada. Los defensores del actual régimen saldrán en su defensa que no es problema del gobierno central, y aunque tienen derecho a opinar la respuesta y su defensa no es aceptable.
Valga retroceder un poco laa película en la historia reciente de El Salvador y empecemos a partir de las campañas electorales en las que el actual mandatario (Batman) brilló por su aunsecia. Sin embargo en las redes sociales ofreció, prometió a veteranos y lisiados de guerra aumento en sus pensiones, a la Universidad de El Salvador también prometió ésto y lo otro, a las Alcaldías y Concejeros Municipales otro aumento más en FODES, un nuevo Hospital Rosales y bla bla promesas, promesas incumplidas una a una o una y otra vez.
Los mismos de siempre, otro estribillo de batalla utilizado en sus campañas mediáticas para vender la pomada que él era y es diferente. La realidad en la que está sumergida nuestro pueblo difiere, contrasta con innundaciones, familias que pierden todos sus humildes haberes a causa de las mismas, abandono total en lo que es la salud preventiva, proyectos u obras encaminadas potenciar y mejorar el nivel de vida, de educación, salud, en el plano laboral, en el agro y más.
La actual administración se caracteriza desde sus inicios por: contactos con sectores de la extrema derecha de Estados Unidos, y ello puede explicar por qué su supuesta “enemistad con el actual gobierno democrata”. En otras palabras un sow más. Pues en Estados Unidos son los mismos de siempre y con las mismas politicas de invasión y saqueo.
En la actual administración con todo y que se jacte que la delincuencia ha “bajado” y por supuesto que es de alegrarse que de ser así y de una vez por todas. La realidad documentada también es otra a la pintada y ya no es “cool” como se ha engañado a la gente.
Se abroga el mérito que otros merecen, inaugura obras que otros iniciaron, pero no es capaz de inaugurar ni una propia.
Entre tanto ya que hay mucho que descubrir y desenmascarar podemos dejar por hoy asi para luego seguir, es que la única promesa que a cumplido al pie de la letra es dar medicina amarga al pueblo.
Ningun plan de contención, de pevisión, nada de nada