Como es sabido de muchas conciencias progresistas, democráticas y revolucionarias en nuestro país El Salvador, las luchas de nuestro pueblo se remontan a la llegada misma de la espada invasora, huestes al servicio de la corona española en los años 1500.
Luchas populares de nuestros ancestros que indómitamente resisitieron al invasor colonialista. Las luchas y gestas por la independencia lograron la primera fase en 1821. Sin embargo poco más de 10 años después se alza Anastacio Aquino, y combate contra la injusticia del poder criollo emergente post independista.
Las luchas continuaron en uno y otro punto del país pero no fue sino hasta en los años 20 cuando se formaron los círculos Marxistas y las luchas llegaron a abrazar ideales, objetivos, métodos de organización y lucha. Las luchas entonces dejaron de ser escaramuzas para saber orientarlas y con objetivos mediante un Partido Revolucionario. Disciplina, Unidad, Organización y surgido del pueblo para luchar junto, con y para el pueblo. Nuestro Pueblo.
En 1932 el levantamiento de los pueblos originarios y del campesinado en tenía una estrella, un rumbo a seguir y era la toma del poder para poder construir el Socialismo. Los pioneros en ese salto cualitativo en las luchas del pueblo salvadoreño están representadas en las figuras de Alfonso Luna, Mario Zapata, y Agustín Farabundo Martí quienes fueran capturados y fusilados y del Cacique Feliciano Ama quien fuera ahorcado por las hordas criminales de la dictdura. Entre ellos se destaca también el compañero Miguel Mármol quien también pasara por el pelotón de fusilamiento y logró sobrevivir y ser recatado por colabodores del movimiento insurreccional. Miguel Mármol fiel a sus convicciones y conciencia de clase, como también a sus camaradas asesinados impulsa el trabajo político y organizativo que fuera cápaz de enfrentar a la dictadura del momento y hacer realidad la transformación estructural profunda y radical en en El Salvador.
Por ello y por mucho más este sábado 19 de febrero llamamos a participar en la restauración del Memorial de los Pioneros de la Revolución. Memoria viva que nos recuerda, enseña, orienta y fortalece nuestra decisión de lucha contra la insjusticia social, el reparto equitativo de los recursos, por la defensa de Nuestra Soberanía que no Somos colonia de nadie.