Cuando observaron, reflexionaron y cuestionaron ese mundo burgués y se dieron cuenta que no era su mundo, miles y miles de hombres y mujeres decidieron luchar por la construcción popular de una sociedad nueva, con justicia social, desmilitarizada, sin oligarcas e imperios que atontaran, confundieran y aplastaran sus conciencias al servicio del gran capital, ese día descubrieron también que la plena libertad, la construcción de la democracia, el goce de sus derechos en un ambiente de paz, solo es posible si todos los oprimidos se organizan y luchan por esos ideales, ¡Patria Libre o Morir… Patria o Muerte… Venceremos!
La multiplicidad de formas de lucha, desde la parlamentaria hasta la guerra de guerrillas afloraron en Guazapa, cimentadas en el interés supremo del pueblo, fuente del poder político y en ese fragor de la lucha, dice Ignacio Melgar, 46 compas ofrendaron sus vidas por sus idearios “Combatir hasta vencer por Centroamérica, la liberación y el socialismo”, entre ellos cuarenta compañeros, cinco compañeras y un niño asesinado, militantes del Partido Revolucionario de los Trabajadores Centroamericanos PRTC.
Otros 26 compas de las Fuerzas Populares de Liberación (FPL) entre ellos cuatro compañeras y veintidós compañeros derramaron su sangre en esas tierras del cerro de Guazapa enarbolando la bandera de “Revolución o muerte… El pueblo armado Vencerá”.
Así como también 35 compas de las Fuerzas Armadas de la Resistencia Nacional (FARN, entre ellas once compañeras y veinticuatro compañeros sellaron con sus vidas la consigna de “Lucha Armada Hoy… Socialismo Mañana”.
Más un total de 69 personas que fueron asesinadas, entre ellas dieciocho mujeres y 51 hombres, aparecen sus nombres en el “Monumento a los Caídos”, sin tener vínculos con ninguna organización político militar pertenecientes al FMLN.
Estos datos e información están en proceso de investigación y corroboración de ahí que pueden aparecer nombres incompletos e incluso los nombres pueden estar mal escritos o no aparecer, de hecho, no aparecen los listados de los compas del Ejército Revolucionario del Pueblo ERP ¡con la inquebrantable decisión de luchar por la revolución salvadoreña, vencer o morir! y los listados de los nombres de los compañeros de las Fuerzas Armadas de Liberación FAL-PCS, “Proletarios de todo el Mundo, Unidos”; pero son los hilos que se están hilvanando desde sus protagonistas para la construcción de la Memoria Histórica del FMLN.
En el “Monumento a los Caídos” están grabados unos pensamientos “En nombre de los que ofrendaron la vida, derramaron su sangre y dieron el sacrificio para la igualdad, beneficios y los derechos sociales”.
“A los héroes y mártires quienes hicieron suyos los ideales de un país más justo, solidario y socialista, rendimos este homenaje honrando su sangre derramada en combate”.
Uno de los principales organizadores, Ignacio Melgar, manifiesta desde el pueblo Kingston, Ontario, Canadá “Bienvenidas y bienvenidos, compañeros y compañeras, familiares y amigos. Bienvenidos al glorioso, bello, revolucionario y bastión militar del volcán de Guazapa, antes llamado “Cihuatán”, por nuestros aborígenes de la familia Pipiles que significa El volcán de la Mujer Dormida. Ahora, se le conoce como cerro de Guazapa, pues ya no hay huellas de tal erupción.
Ignacio Melgar, quien fuera un experimentado guerrillero urbano-rural estuvo al mando de uno de los frentes de guerra para la Ofensiva Final del 10 de enero de 1981, hoy se dedica a recuperar y sistematizar sus memorias de sus experiencias de lucha contra la dictadura militar, la oligarquía y el imperialismo yanqui, y cuando escribía uno de sus libros titulado “Una Fortuna Odiosa, encontró en la Universidad de Kingston, Ontario Canadá, la información de una persona que estuvo en el cráter del volcán y cogió algunas piedras volcánicas para analizarla, llegando a la conclusión que el volcán de Guazapa hizo erupción, hace 1,600 años. Ignacio finaliza diciendo “¡cuídense de la maldita pandemia!”.
Los que venimos todos los años y somos los organizadores de la caminata al “Monumento a los Caídos” somos todos los hijos, nunca faltamos, dice Porfirio Danilo, quien me aclara “mi papá era celebrador de la palabra, era un líder campesino nato “original” lo quería la gente de los cantón de Miranda El Zapo y en la hacienda, era el secretario del Movimiento de Liberación Popular (MLP) y de las Brigadas de Trabajadores del Campo (BTC), cuando lo capturaron venía de cumplir una misión, o sea, regresaba de una reunión en San Salvador, y como no tenía dónde dormir y ya era de noche, no se podía venir para su casa y era prohibido ir a dormir a donde otro compañero; pero Ignacio, su primo, vivía ya en San Salvador y le dijo no te puedo dejar solo, venite a dormir a mi casa y así fue; pero mi papá tempranito como a las 4 de la mañana se fue de la casa de su primo Ignacio, ni se despidió y cuando llegó a Aguilares pasó a un comedor de la Lupe a desayunar, ahí fue donde le pusieron el dedo y lo capturaron, y después lo asesinaron los Guardias Nacionales a puras torturas por orden del alcalde de Suchitoto. Según información, cuando mi papá se sintió capturado les dijo a los Guardias que llamaran al alcalde, pensó que lo podía salvar por ser conocido de él y dicen que llegó el alcalde y les dijo a los guardias ¡ah! es Elías, mátenlo. A mi papá lo torturaron, lo acostaron en una cama de alambre de púas y se paraban y brincaban sobre su cuerpo y le hicieron heridas con Gillette (hoja de afeitar) y por último así vivo le cortaron la lengua -gran valentía de un verdadero revolucionario no quemó a nadie de sus compañeros, que gran ejemplo la de mi papá-”
Es costoso y dolorosos recordar estos asesinatos políticos porque cuando me cuenta Porfirio lo sucedido, sus ojos se humedecen y las lágrimas se derraman sobre la tierra. “Jamás voy a traicionar los ideales de mi padre y de las tres hermanas que murieron peleando por una nueva sociedad, no más traidores”, sentencia Porfirio.
El Homenaje a los Caídos se desarrolla en momentos que la pandemia COVID-19 flagela a los más pobres, testigos hoy de dos asesinatos políticos que realizaron hombres de confianza del Ministro de Salud que se convierte en un hecho agravado cuando el presidente de la República de El Salvador, Nayib Bukele, arropado de su ideología política dice: que es un auto atentado.
La tendencia electoral marcha a la concentración del poder político del bloque de la derecha que consolidará su proyecto “fascista en El Salvador”, mientras la izquierda muestra una dispersión ideológica y problemas de identidad. Si esa situación se da, deberá entonces levantarse las banderas de lucha por las libertades democráticas, la lucha por la legalidad, la lucha por los espacios ganados de participación en el parlamento y la defensa de los Derechos socio económicos y políticos con una amplia participación de multiplicidad y diversidad de organizaciones populares y sociales.
Familiares de Lucio Elías Acosta cada año suben a Guazapa a conmemorar a quien en vida fuera el predicador de la Palabra (en medio de la foto Ignacio Melgar).
Fuente: https://www.diariocolatino.com/