Escrito Prensa FMLN Publicado 15 de Octubre 2020
Consecuentes con nuestro compromiso en garantizar el bienestar a la población, aprobamos con nuestros 23 votos, en la Sesión Plenaria de este jueves 15 de octubre, la reforma constitucional que reconoce el agua como un derecho, y obliga al Estado a garantizar el acceso y saneamiento del recurso hídrico. El dictamen que contiene la reforma a los artículos 2 y 69 de la Constitución de la República se aprobó con 78 votos.
Al igual que en las legislaturas pasadas, nuestra fracción votó por la reforma constitucional, remarcando el compromiso de ratificar el acuerdo el próximo período. Cabe destacar que en estos 12 años, el tema ha estado en discusión en el Congreso, en dos oportunidades se aprobó la reforma, pero la derecha parlamentaria a última hora negó sus votos.
La legislación salvadoreña establece que toda reforma constitucional aprobada, deberá ratificarse en la siguiente legislatura con 56 votos como mínimo, por tanto, deberá ratificarse en los próximos tres años para que sea efectiva.
“Ha sido todo un proceso…más de tres legislaturas que está en la Asamblea Legislativa el tema”, recordó la diputada Dina Argueta. Por su parte, el diputado Javier Valdez, precisó que el FMLN, y sus diputados desde 2008, han estado listos y votaron en cada oportunidad por las reformas, pero la derecha es la que no acompaña.
“El tema de saneamiento es importante”, enfatizó la diputada Rina Araujo, ya que se obliga al Estado salvadoreño a garantizar políticas a favor de la población. “Esperamos que sea uno de los primeros objetivos de la nueva legislatura (la ratificación”, dijo.
El diputado Milton Garay, calificó como “una fecha memorable” este día, y espera que las demás fuerzas políticas en el próximo período acompañen la reforma acordada.
Para la diputada y jefa de fracción, Nidia Díaz, este “ha sido un largo camino recorrido”, sobre todo para las organizaciones que lideran estas iniciativas. “La ruta para resolver el problema de agua en el país, pasa por la gestión pública”, añadió el diputado Damián Alegría, quien junto a la diputada Cristina Cornejo, apuntaron la necesidad de garantizar que el agua no sea privatizada en un futuro.
