Hoy se cumple un año de gobierno del Presidente Nayib Bukele. Nosotros como estructura parte del movimiento social – popular de nuestro país, realizaremos el recuento de algunas medidas y acciones tomadas por el mandatario, que han significado retrocesos y decadencias en la vida del pueblo salvadoreño.
1. Desde que asumió su mandato como Presidente comenzó a desmantelar las instituciones contraloras, como la Secretaría de Transparencia y Anticorrupción, eso le ha permitido hacer y deshacer en el manejo de los recursos del Estado sin la contraloría social, esto ha significado un retroceso significativo en el empoderamiento del pueblo, en el que hacer público y un atentado a la incipiente democracia.
2. El día que tomo posesión amenazó con darle medicina amarga a las grandes mayorías, lo que esta claro se traduce: en el recorte y desmontaje sistemático de programas sociales como el Apoyo Temporal al Ingreso, Agricultura Familiar, Jóvenes con Todo (orientado para jóvenes de escasos recursos), Ciudad Mujer (recorte de $1.6 millones), Pensión Básica Universal (recorte de $2.3 millones) y Paquetes Agrícolas (recorte de $1.6 millones), el cierre de 17 Equipos Comunitarios de Salud ECOS, dejó sin recursos otros programas entre los cuales podemos mencionar: el fortalecimiento de la salud de la mujer; desmontaje de reforma de salud que había permitido la reducción de mortalidad infantil y materna, operación milagro, escuela inclusiva de tiempo pleno, niñez y juventud del futuro, un niño/a una computadora, sumergiendo en una situación precaria a las grandes mayorías.
3. Desde su primer día comenzó con un ataque directo y sistemático contra la clase trabajadora mientras el Ministro Rolando Castro no cumple con su función de defender los intereses del sector; realizando alrededor de 8 mil despidos arbitrarios incluyendo mujeres embarazadas, personas con enfermedades terminales y discapacitados, condenando a sus familias a situaciones precarias. Así como también no se ha efectuado el aumento al salario mínimo que fue uno de sus principales compromisos de campaña.
4. El Presidente ha sido fuertemente cuestionado por la conformación de su gabinete en donde figuran varios de sus familiares (nepotismo), la incapacidad de los funcionarios para resolver temas palpables como la problemática del desabastecimiento del agua en el gran San Salvador y que para colmo, la población recibió agua contaminada, lo que provocó una crisis sanitaria que no fue tomada con la seriedad debida por parte de los funcionarios y que actualmente no ha sido resuelta.
5. Las medidas que el gobierno ha tomado para atender la pandemia han estado marcadas por la falta de planes serios y la poca transparencia en el manejo de los recursos. Las decisiones improvisadas han sido lo que ha caracterizado al gobierno en esta emergencia y que ha llevado exposición de contagio a miles de salvadoreños, como por ejemplo: el llamado que hizo el Presidente de acudir a los CENADE para solicitar ser incluidos en la entrega de los $300 dólares. No ha cumplido con el compromiso de tiempo en la construcción del hospital en CIFCO para atender la pandemia, además de la poca claridad en cuanto a la capacidad de atención que este tendrá; así mimo la falta de seriedad en cuanto al costo de la obra y su
equipamiento. Lamentamos la compra del fármaco Hidroxicloroquina y su genérico para el tratamiento de pacientes infectados de COVID – 19, por una suma de dinero desconocida y que según la OMS sus efectos pueden causar daños irreversibles y en muchos casos la muerte de los pacientes. Denunciamos el irrespeto a los derechos humanos de las personas que han sido enviadas a los centros de contención, los cuales han llegado a 45 o más días sin hacerles las pruebas respectivas y/o brindar información de su estado de salud. Hacemos un llamado y exigimos transparencia en el manejo de la asignación y ejecución de fondos y bienes públicos que se utilizan en la emergencia.
6. También demandamos la construcción del nuevo Hospital Rosales que fue una promesa de campaña y cuyos fondos el mismo confirmo ya estaban aprobados desde la gestión anterior. Así como la construcción de otros hospitales en distintos puntos del país, que dijo, ayudaría a descentralizar y mejorar la atención hospitalaria.
7. Este gobierno ha estado caracterizado por la improvisación, autoritarismo, militarismo, inoperancia, incapacidad y populismo. Se ha perdido el respeto a la institucionalidad, hay pugnas entre los tres poderes del Estado. En conclusión su verticalismo e imposición de medidas irracionales ha sido lo marcado por este gobierno. Vemos con mucha preocupación las recurrentes violaciones a los derechos humanos y al marco jurídico salvadoreño por parte del Presidente Nayib Bukele y su gobierno, por lo tanto demandamos frenar el ataque a la incipiente democracia, como el hecho suscitado en La Asamblea Legislativa el 9 de febrero y el irrespeto a las resoluciones de Sala de lo Constitucional entre otros.
8. En política exterior se ha caracterizado por la subordinación cada vez más evidente a los intereses de los Estados Unidos, la expulsión del cuerpo diplomático de nuestros hermanos Venezolanos y el reconocimiento al autoproclamado Presidente Juan Guaidó. La confrontación con los países de la región por divulgar información falsa sobre los países hermanos. La falta de transparencia del uso de la donación de México de $30 millones de dólares para el Programa Sembrado Vida. La implementación de una campaña mediática de terror usando la pandemia en contra de nuestros hermanos salvadoreños que se encuentran varados en otros países debido a la misma, violentándoles el derecho constitucional que les corresponde.
9. Como organización social – popular calificamos este primer año como el inicio de una oleada de desempleo y hambre para las grandes mayorías y por lo tanto manifestamos nuestro compromiso de lucha contra las medidas de carácter neoliberal que busca cargar al pueblo con los costos de la mala administración de los recursos asignados para atender la pandemia, frenar los despidos, se declare el derecho humano al agua, se apruebe la ley general del agua, el aumento al salario mínimo, un sistema de pensiones público, solidario, inclusivo y universal por la sustitución de las AFP’S. El respeto a los derechos laborales. La defensa de la soberanía y seguridad alimentaria. Por las conquistas del sector de veteranas y veteranos de guerra. Creemos en el dialogo como método para resolver las diferencias.
San Salvador, 1 de junio de 2020.