La decisión del Consejo de Ministros, de ordenarle a la Asamblea Legislativa que sesione de forma extraordinaria el domingo 9 de febrero, para abordar lo relativo a un préstamo para seguridad, constituye un intento de Golpe de Estado Parlamentario fraguado por el presidente Nayib Bukele. Al respecto, Profesionales por la Transformación de El Salvador (PROES) expresa lo siguiente:
1. La convocatoria del Consejo de Ministros es inconstitucional porque fue emitida excediendo las facultades que la Constitución establece (Art. 164 CN). Por lo tanto, es un acto nulo que no debe ser obedecido por la Asamblea Legislativa.
2. Como la Constitución establece la independencia de poderes, si el presidente de la república utiliza la fuerza pública para ocupar la Asamblea Legislativa, habrá perpetrado un Golpe de Estado Parlamentario que rompería el estado de derecho. El proceso democrático, construido a partir de la firma de los acuerdos de paz de 1992, tendría un grave retroceso.
3. El presidente de la república no está pasando por buen momento, pues las encuestas revelan que la mayoría de la gente percibe que sus condiciones de vida han desmejorado. Y la gente tiene derecho de quejarse, porque hay casi 7,000 personas despedidas del sector público, algunos bienes y servicios básicos están más caros, los salarios siguen congelados, las enfermedades aumentan y la crisis del agua afectó a muchas familias. Además, se están cerrando programas sociales que beneficiaban a la población de menos ingresos.
4. Mientras la vida se endurece para la mayoría popular, el Gobierno sigue sin plan y se desenvuelve en medio de la improvisación y el caos.
La interpelación de la Asamblea Legislativa a la titular de salud y al titular de ANDA, son solo una expresión del mal funcionamiento del Gobierno.
5. La incapacidad para gobernar y el incipiente malestar de la población podrían ser algunas de las razones por las que el presidente generó este hecho político.
El tema de fondo no es el préstamo para seguridad, sino el interés del presidente de mostrase como víctima de la Asamblea para así ganarse simpatía, sobre todo de cara a las elecciones de 2021. Sin embargo, el asunto no es solo mediático, sino de carácter vital, pues el presidente también procura plantar una dictadura.
6. Como profesionales comprometidos con la transformación de nuestro país, rechazamos el intento del presidente de violentar la Constitución y controlar la Asamblea Legislativa mediante una acción violenta de la Fuerza Armada y la PNC.
Exhortamos a todos los sectores políticos y sociales a defender la independencia de poderes y la legalidad democrática amenazada por el primer mandatario.
San Salvador, 9 de febrero de 2020
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